LOS DULCES DE CARNAVALLa pequeña confitería Guzmán, con más de 120 años de existencia, es la encargada de dar vida a los confites de carnaval: caramelos de azúcar de distintos tamaños que se ofrecen durante estas celebraciones, aunque hoy ya se venden todo el año. No son rompemuelas, se deshacen al morderlos y destilan un rápido sabor a anís, otros están rellenos de maní o de coco. Hay también alfeñiques, caramelos de violeta y peritas de limón. La tienda es un breve salto al pasado y un delicioso divertimento.
Excelente trato por parte del Sr. Dennys
Exelente
Rico